“Es uno de los errores más graves en el tratamiento de las enfermedades el que haya médicos para el cuerpo y médicos para el alma ya que no se puede separar el uno del otro” (Platón).
Hoy en día está más que comprobado que cuerpo y mente son inseparables y se influyen mutuamente. Cuando el cuerpo enferma, se producen determinadas reacciones en los procesos mentales de la persona, y si es la mente la que sufre, las emociones y los pensamientos conllevan afectaciones del cuerpo. Es aquí donde aparecen los trastornos psicosomáticos. Los síntomas psicosomáticos más frecuentes suelen ser cefaleas, dolores de espalda o de barriga, mareos o vértigos, palpitaciones, náuseas, dolor en el pecho o las articulaciones, dificultad al respirar, colon irritable, etc.
Si sufres de alguna molestia persistente que está afectando tu calidad de vida y, después de consultar a un médico especialista y descartar la existencia de alguna enfermedad física, te sigues encontrando mal, ven a vernos en el Gabinte de Psicología Ganzheit. Juntos buscaremos los factores que pueden estar influyendo en el origen, el mantenimiento y la evolución de tu malestar, y elaboraremos estrategias para cambiarlos. Como los factores psicológicos son los que originan los síntomas psicosomáticos, mediante la psicoterapia podemos conseguir muy buenos resultados.